Puebla, Puebla.- Ante un modelo económico que está en declive, la revolución pacífica en México, entendida ésta como un cambio radical en la estructura económica de la sociedad, debe ser encabezada por el pueblo, que es quien sufre la pobreza que genera el modelo económico actual, afirmó el Secretario General del Movimiento Antorchista, Aquiles Córdova Morán, durante una reunión con dos mil activistas y plenistas de la organización en la capital de Puebla.
La masa anónima -afirmó Córdova Morán- de la que muy pocos se ocupan, la que no aparece en la historia con nombre y apellido, es la heroína de todas las grandes gestas históricas de la humanidad. Pero las masas no son las que escribe la historia, la masa no puede porque ella se dedica a hacer la historia, no a escribirla.
Por lo que explicó que la revolución no puede hacerse sin la participación de todas las masas populares, pues la mejora nunca se ha producido por las pequeñas élites del poder económico y político.
“La revolución ha sido muy mal entendida y, en los últimos tiempos, atacada, combatida y satanizada, porque a todo mundo le suena a balazos, a muertos, a sangre y a anarquía, pero la revolución en su esencia no es eso, la revolución es un cambio radical que suele hacerse cada cierto tiempo en la historia de los pueblos porque se vuelve indispensable para que la sociedad pueda seguir funcionando y viviendo”, explicó el líder nacional.
Aquiles Córdova sostuvo que cuando un modelo económico ya es decadente sólo le produce al pueblo injusticia, desigualdad e ignorancia: “y si el pueblo protesta le produce cárcel, persecución y garrotazos. Es en ese momento cuando este cambio radical se vuelve indispensable, pero esos cambios siempre los ha hecho la masa anónima, el pueblo trabajador”.
El líder nacional del antorchismo explicó que el modelo neoliberal está en decadencia y prueba de ello es la pésima educación, los bajos niveles de los servicios de salud, la falta de empleo y los salarios de hambre, “no hay vivienda para el pueblo pobre, la luz va para arriba, el gas va para arriba, pero los salarios van para abajo”.
En México somos 66 millones de pobres, la pobreza crece a pesar de los programas sociales; los adultos mueren porque se alimentan mal, los niños no se desarrollan porque no tienen qué comer, la pobreza está arruinando al pueblo de México y eso es la consecuencia de la empresa privada y el mercado.
Boletín.
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